Que el verano ha llegado no es ninguna sorpresa. No ha hecho falta que el calor llame a nuestra puerta porque se ha colado por la ventana, abierta de par en par con la difícil misión de aligerar el ambiente. Por la noche doy una vuelta, y otra. Voy a por un vaso de agua, con hielo. Vuelvo a la cama. Pero es imposible conciliar el sueño, el aire corre menos que el R29. Sin saber como mi mente acaba en la Fórmula1 y mientras lo único que pasa en la oscura noche es el tiempo, pienso en como ha cambiado este año todo en mi deporte estrella y en las consecuencias que está teniendo. Con un leve pinchazo de culpa me acuerdo de que todavía no he recogido del kiosco los Dvd´s de las dos últimas carreras. Más avergonzada todavía me doy cuenta de que apenas he ojeado los últimos números de mis revistas favoritas más allá de mis columnas preferidas. Con los ojos como platos pienso que hace semanas que ni siquiera tengo tertulias con mis amigos ingleses porque he comprobado, horrorizada, que empezamos a estar de acuerdo. Apenas se de que escribir en el blog. Tocada y hundida ( y sin poder dormir). Me pregunto quién ha cambiado la Fórmula 1 y no puedo evitar buscar un culpable...o culpables.
Cada fin de semana es un Dejavú. La sensación de "esto ya lo he vivido" solo logra disolverse con la acción que se vive en la parte baja del pelotón.
Claro que cuando el reloj marca las 03.24 de la mañana y una está en la cama sin pegar ojo, es muy fácil criticar. ¿Que haría yo para cambiar las cosas? ¿Que sugeriría yo para que los fines de semana volviesen a ser tan emocionantes, que la razón de mi insomnio fuese la emoción de saber que voy a vivir una carrera apasionante? ¿Que consejos podría dar una novata de la Fórmula1 para que todos estuviéramos haciendo cuentas, cábalas y suposiciones hasta el último momento para saber quién será el campeón del mundo? ¿Que circunstancias tendrían que darse para que volviésemos a molestarnos por que hay más atención en los despachos que en la ardiente pista?
¡Y que se yo!
Pensándolo bien...quizá yo daría un punto a las vuelta rápida de la carrera. Y otro a la Pole ¿porque no? El ganador de la carrera tendría 12 puntos, por 8 del segundo clasificado y 6 del tercero, dejando que el resto complete las posiciones de puntos hasta el octavo puesto, como hasta ahora. Retiraría la norma de hacer públicas las cargas de gasolina...bendita incertidumbre de antaño que evitaba que los pilotos que habían hecho (aparentemente) un buen trabajo con dos gotas de gasolina tuviese que salir con la cabeza gacha del circuito el sábado por "vergüenza" aparte de la emoción de no saber cuando para quiéna ciencia cierta. Conmigo de presidenta, habría dos distribuidores de neumáticos y con sonrisa de oreja a oreja daría la bienvenida a Michelín. Sin embargo, dejaría los slicks.
Un retoque por aquí y otro por allí.
La coches correrían con las normas de el año pasado puesto que no he visto que hayamos ganado nada importante con las normas aerodinámicas de este año. Y puedo prometer y prometo que...Y cuando el reloj marca las 04.07 definitivamente reconozco que estoy delirando...Yo, presidenta de la FIA. Bueno Mosley lo es y mira que al hombre le dan por todos lados (y no va con segundas)...
Parece que por fin el sueño quiere darme audiencia y no me queda otra que rendirme y soñar con que vuelva la F1 que hace muy poquito me tenía entregada.